Muchas veces se discute acerca de lo mismo ¿cómo debemos designar y/o llamar a los aprendices de tuno?, si nos fijamos en el Diccionario de la Real Academia Española (darle click si queréis entrar en la página) encontraremos lo siguiente para ambas palabras:
NOVATO:
(De nuevo y -ato).
1. adj. Nuevo o principiante en cualquier facultad o materia. U. t. c. s.
PARDILLO:
(Del dim. de pardo).
1. adj. Aldeano, palurdo. U. t. c. s.
2. adj. Dicho de una persona: Incauta, que se deja estafar fácilmente. U. t. c. s.
3. m. Ave del orden de las Paseriformes, de unos catorce centímetros desde la punta del pico hasta el extremo de la cola y dos decímetros y medio de envergadura, plumaje de color pardo rojizo en general, negruzco en las alas y la cola, manchado de blanco en el arranque de esta y en las remeras extremas, carmesí en la cabeza y en el pecho, y blanco en el abdomen. La hembra tiene colores menos vivos. Es uno de los pájaros más lindos de España, se alimenta de semillas, principalmente de linaza y cañamones, canta bien y se domestica con facilidad.
4. m.paño pardillo: El más tosco, grueso y basto que se hace, de color pardo, sin tinte, de que vestía la gente humilde y pobre.
5. m.vino pardillo: vino entre blanco y tinto, más bien dulce que seco, y de baja calidad.
Un regalito a los amantes de la heráldica, al existir el apellido Pardillo, también existe su escudo:
He considerado que el término apropiado debería ser novato, puesto que si analizamos la segunda acepción del término "pardillo", pues no creo ni que los veteranos deseamos, en nuestra Tuna, tipos que sean necios, incautos o que se dejen estafar fácilmente (ni creo que los aprendices deseen ser de esa manera).
Me atrevería a decir que, por lo menos en España, son muy pocas las Tunas que usan este término, tal vez sólo en la comunidad madrileña lo usan (y una que otra más, pues de que las hay, las hay), designándose en el resto de la península, el término "novato" y es que otro de los "significados no oficiales" de la palabra "pardillo" (por lo menos en la Madre Patria) es el tonto, el gil, el "monse", el "lorna".
(Darle click a la imagen para poder leerla)
Quiero compartir un artículo acerca de un ilustre miembro de la Sociedad de Ornitología de España:
...La afición valenciana, que tiene una tradición cuyo origen no lo recuerda nadie por no haber nada escrito sobre el particular, pero que creemos que es de las más antiguas de la nación, ya que los más viejos del lugar siempre han hablado de «había entonces», «se hacía entonces», esta afición también tiene una gran predilección por el «pardillo», pues después del ruiseñor es el pájaro que dispone de una especial asimilación a todo lo que oye Y. Por consiguiente, posee tanta variación de canto...
En fin, enjaulamos de varios sitios y los vamos probando, porque, según las aguas (lo fuertes que sean) tienen los pájaros más o menos aguante en el canto que se les enseña; hay ejemplares de lugares que el primer año inician el canto, al segundo se superan y, aunque tengan 10 ó 12 años, aún continúan con la misma fuerza como si fueran pichones de sobre año; sin embargo hay ejemplares de otros lugares que ya el primer año dan todo lo que aprenden y con fuerza.
Solemos poner de 6 a 12 pájaros de cada sitio; los que somos criadores empedernidos los enumeramos y les hacemos una ficha; escribimos de cada ejemplar la fecha en que se ha enjaulado y cuál es su procedencia. Los ponemos de dos en dos en las jaulas hasta que saben bien dónde está la comida y el agua, unos cinco o seis días; cuando ya lo han aprendido, se coloca cada uno en una curiosa o cajón, separándolos. También es ahora el momento de colocar al «maestro educador» en un sitio que, por la distancia, lo oigan los pichones, pero que no lo castiguen mucho, ya que, cuando son pichones, muchos de ellos quieren empezar a cantar, pero muy de prisa y con giros que la mayoría de los mismos no son de calidad...
Mientras tanto, el maestro educador les irá cantando y diciendo las notas buenas que a nosotros nos gustan; al mismo tiempo, los pichones van cambiando la pluma y, al cambiar la pluma, entran en un estado de letargo, se están muy quietos y, al no ver a nadie, están atentos a lo que oyen del maestro educador. Ante todo debemos advertir que no hay que tener cerca pájaros de otras especies, ya que el pardillo asimila todo lo que oye y lo canta con su tono de voz...
Finalmente, los iremos destapando y poniendo a cada uno por separado para poder observados bien cuando inicien el canto, pues, a los quince o veinte días .empiezan a decir todo lo que han aprendido del maestro educador.
En fin, enjaulamos de varios sitios y los vamos probando, porque, según las aguas (lo fuertes que sean) tienen los pájaros más o menos aguante en el canto que se les enseña; hay ejemplares de lugares que el primer año inician el canto, al segundo se superan y, aunque tengan 10 ó 12 años, aún continúan con la misma fuerza como si fueran pichones de sobre año; sin embargo hay ejemplares de otros lugares que ya el primer año dan todo lo que aprenden y con fuerza.
Solemos poner de 6 a 12 pájaros de cada sitio; los que somos criadores empedernidos los enumeramos y les hacemos una ficha; escribimos de cada ejemplar la fecha en que se ha enjaulado y cuál es su procedencia. Los ponemos de dos en dos en las jaulas hasta que saben bien dónde está la comida y el agua, unos cinco o seis días; cuando ya lo han aprendido, se coloca cada uno en una curiosa o cajón, separándolos. También es ahora el momento de colocar al «maestro educador» en un sitio que, por la distancia, lo oigan los pichones, pero que no lo castiguen mucho, ya que, cuando son pichones, muchos de ellos quieren empezar a cantar, pero muy de prisa y con giros que la mayoría de los mismos no son de calidad...
Mientras tanto, el maestro educador les irá cantando y diciendo las notas buenas que a nosotros nos gustan; al mismo tiempo, los pichones van cambiando la pluma y, al cambiar la pluma, entran en un estado de letargo, se están muy quietos y, al no ver a nadie, están atentos a lo que oyen del maestro educador. Ante todo debemos advertir que no hay que tener cerca pájaros de otras especies, ya que el pardillo asimila todo lo que oye y lo canta con su tono de voz...
Finalmente, los iremos destapando y poniendo a cada uno por separado para poder observados bien cuando inicien el canto, pues, a los quince o veinte días .empiezan a decir todo lo que han aprendido del maestro educador.
(Enjaule y educación del Pardillo, Vicente Pruñonosa Fernández - http://members.fortunecity.es/pachi2/vicente2.htm)
Jugaré a ser el abogado del diablo, según el anterior texto, las partes resaltadas, el pardillo es de entre todos los pájaros, el mejor aprendiz, y si bien algunos son muy buenos a partir del segundo año, hay algunos que son muy buenos desde el primer año de enseñanza dada por el "maestro cantor", sumándola a la cuarta acepción de la palabra, que hace clara referencia al traje del mismo, ¿no creen que existen muchas coincidencias?
Pero indistintamente de si le digamos "pardillo" o "novato" (a pesar de todo, creo a título personal, que NOVATO es el término correcto) ¿porqué estos señores obedecen sin replicar lo que les dicen sus veteranos (tunos) como:
- Que les lleven sus instrumentos,

- Ponerse de rodillas,

- Ponerlos en posturas graciosas,

- Disfrazarlos,

Novatada a los novatos de la Tuna de Ciencias de Granada (ENLACE AQUÍ)
- Mandarlos a bailar con cualquier chica que veamos pasar (no sólo en alguna presentación)

y tantas muchas otras cosas más...
Y es que desde tiempos inmemoriales y como dice el título de este blog: SIEMPRE DOS HAY, UN MAESTRO Y UN APRENDIZ, en el cual los veteranos ponen ciertas pruebas a los nuevos hasta que estos demuestren lo necesario para poder llegar a ser parte de los antiguos.
Las tradiciones estudiantiles no fueron ajenas a esto, ya que podemos observar en muchos libros de la picaresca española en donde se habla acerca de estos "aprendices" (que no eran novatos de la Tuna, ojo) como:
- La vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades (Anónimo - 1554 primera impresión)
- Primera parte de Guzmán de Alfarache (Mateo Alemán - 1599)
- Segunda parte de la vida de Guzmán de Alfarache, atalaya de la vida humana (Mateo Alemán - 1604)
- Historia de la vida del Buscón, llamado don Pablos; ejemplo de vagabundos y espejo de tacaño (Francisco de Quevedo - 1626)
- La vida y hechos de Estebanillo González, hombre de buen humor, compuesta por él mismo (Anónimo - 1646)
Para muestra citamos un pequeño fragmento de la primera novela ya citada:
..."Y así me fui para mi amo, que esperandome estaba. Salimos de Salamanca, y llegando a la puente, esta a la entrada della un animal de piedra, que casi tiene forma de toro, y el ciego mandome que llegase cerca del animal, y allí puesto, me dijo:"Lázaro, llega el oído a este toro, y oirás gran ruido dentro del."Yo simplemente llegue, creyendo ser ansí; y como sintió que tenia la cabeza par de la piedra, afirmo recio la mano y diome una gran calabazada en el diablo del toro, que más de tres días me duró el dolor de la cornada, y dijome:
"Necio, aprende que el mozo del ciego un punto ha de saber mas que el diablo", y rió mucho la burla.
Pareciome que en aquel instante desperté de la simpleza en que como niño dormido estaba. Dije entre mí:
"Verdad dice este, que me cumple avivar el ojo y avisar, pues solo soy, y pensar como me sepa valer."
(La vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades - Anónimo 1554)
Según las antiguas tradiciones estudiantiles, los novatos han sido presas de las burlas de sus veteranos, de entre todas estas, la que normalmente cito, es una de las que más llamaban mi atención, la denominada "NEVADA", que consistía que por su condición de nuevo, los antiguos se acercaban y lo escupían, por lo que este estudiante no le quedaba otra que cubrirse con su capa, recibiendo esta la totalidad de los gargajos como si se tratase de una lluvia con nevada incluída, para tal, ahora toca citar otra de las novelas de picaresca:
Amaneció, y helos aquí en camisa a todos los estudiantes de la posada a pedir la patente a mi amo. Él, que no sabía lo que era, preguntóme que qué querían; yo, entre tanto, por lo que podía suceder, me acomodé entre dos colchones y sólo tenía la media cabeza fuera, que parecía tortuga. Pidieron dos docenas de reales; diéronselos, y con tanto comenzaron una grita del diablo, diciendo -"¡Viva el compañero, y sea admitido en nuestra amistad. Goce de las preeminencias de antiguo.Pueda tener sarna, andar manchado y padecer la hambre que todos".
Y con esto -¡mire v.m. qué privilegios!- volaron por la escalera, y al momento nos vestimos nosotros y tomamos el camino para escuelas.
A mi amo, apadrináronle unos colegiales conocidos de su padre y entró en su general, pero yo, que había de entrar en otro diferente y fui solo, comencé a temblar. Entré en el patio, y no hube metido bien el pie, cuando me encararon y empezaron a decir: -"¡Nuevo!". Yo, por disimular di en reír, como que no hacía caso; mas no bastó, porque llegándose a mí ocho o nueve, comezaron a reírse. Púseme colorado; nunca Dios lo permitiera, pues, al instante, se puso uno que estaba a mi lado las manos en las narices y, apartándose, dijo: -"Por resucitar está este Lázaro, según hiede". Y con esto todos se apartaron tapándose las narices. Yo, que me pensé escapar, puse las manos también, y dije: -"Vs. ms. tienen razón, que huele muy mal". Dioles mucha risa, y apartándose, ya estaban juntos hasta ciento, comenzaron a escarbar y tocar el arma, y en las toses y abrir y cerrar de las bocas, vi que se me aparejaban gargajos.
En esto, un manchegazo acatarrado hízome alarde de uno terrible, diciendo: -"Esto hago". Yo, entonces, que me vi perdido, dije: -"¡Juro a Dios que ma...!". Iba a decir "te", pero fue tal la batería y lluvia que cayó sobre mí, que no pude acabar la razón. Yo estaba cubierto el rostro con la capa, y tan blanco que todos tiraban a mí; y era de ver cómo tomaban la puntería.
Estaba ya nevado de pies a cabeza, pero un bellaco, viéndome cubierto y que no tenía en la cara cosa, arrancó hacia mí diciendo con gran cólera: -"¡Basta, no le matéis!"; que yo, según me trataban, creí dellos que lo harían. Destapéme por ver lo que era, y, al mismo tiempo, el que daba voces me enclavó un gargajo en los dos ojos. Aquí se han de considerar mis angustias. Levantó la infernal gente una grita que me aturdieron. Y yo, según lo que echaron sobre mí de sus estómagos, pensé que por ahorrar de médicos y boticas aguardan nuevos para purgarse.
Quisieron tras esto darme de pescozones, pero no había dónde sin llevarse en las manos la mitad del afeite de mi negra capa, ya blanca por mis pecados. Dejáronme, y iba hecho zufaina de viejo a pura saliva. Fuime a casa, que apenas acerté, y fue ventura el ser de mañana, pues sólo topé dos o tres muchachos, que debían de ser bien inclinados, porque no me tiraron más de cuatro o seis trapajos, y luego me dejaron.
Amaneció, y helos aquí en camisa a todos los estudiantes de la posada a pedir la patente a mi amo. Él, que no sabía lo que era, preguntóme que qué querían; yo, entre tanto, por lo que podía suceder, me acomodé entre dos colchones y sólo tenía la media cabeza fuera, que parecía tortuga. Pidieron dos docenas de reales; diéronselos, y con tanto comenzaron una grita del diablo, diciendo -"¡Viva el compañero, y sea admitido en nuestra amistad. Goce de las preeminencias de antiguo.Pueda tener sarna, andar manchado y padecer la hambre que todos".
Y con esto -¡mire v.m. qué privilegios!- volaron por la escalera, y al momento nos vestimos nosotros y tomamos el camino para escuelas.
A mi amo, apadrináronle unos colegiales conocidos de su padre y entró en su general, pero yo, que había de entrar en otro diferente y fui solo, comencé a temblar. Entré en el patio, y no hube metido bien el pie, cuando me encararon y empezaron a decir: -"¡Nuevo!". Yo, por disimular di en reír, como que no hacía caso; mas no bastó, porque llegándose a mí ocho o nueve, comezaron a reírse. Púseme colorado; nunca Dios lo permitiera, pues, al instante, se puso uno que estaba a mi lado las manos en las narices y, apartándose, dijo: -"Por resucitar está este Lázaro, según hiede". Y con esto todos se apartaron tapándose las narices. Yo, que me pensé escapar, puse las manos también, y dije: -"Vs. ms. tienen razón, que huele muy mal". Dioles mucha risa, y apartándose, ya estaban juntos hasta ciento, comenzaron a escarbar y tocar el arma, y en las toses y abrir y cerrar de las bocas, vi que se me aparejaban gargajos.
En esto, un manchegazo acatarrado hízome alarde de uno terrible, diciendo: -"Esto hago". Yo, entonces, que me vi perdido, dije: -"¡Juro a Dios que ma...!". Iba a decir "te", pero fue tal la batería y lluvia que cayó sobre mí, que no pude acabar la razón. Yo estaba cubierto el rostro con la capa, y tan blanco que todos tiraban a mí; y era de ver cómo tomaban la puntería.
Estaba ya nevado de pies a cabeza, pero un bellaco, viéndome cubierto y que no tenía en la cara cosa, arrancó hacia mí diciendo con gran cólera: -"¡Basta, no le matéis!"; que yo, según me trataban, creí dellos que lo harían. Destapéme por ver lo que era, y, al mismo tiempo, el que daba voces me enclavó un gargajo en los dos ojos. Aquí se han de considerar mis angustias. Levantó la infernal gente una grita que me aturdieron. Y yo, según lo que echaron sobre mí de sus estómagos, pensé que por ahorrar de médicos y boticas aguardan nuevos para purgarse.
Quisieron tras esto darme de pescozones, pero no había dónde sin llevarse en las manos la mitad del afeite de mi negra capa, ya blanca por mis pecados. Dejáronme, y iba hecho zufaina de viejo a pura saliva. Fuime a casa, que apenas acerté, y fue ventura el ser de mañana, pues sólo topé dos o tres muchachos, que debían de ser bien inclinados, porque no me tiraron más de cuatro o seis trapajos, y luego me dejaron.
(Historia de la vida del Buscón, llamado don Pablos; ejemplo de vagabundos y espejo de tacaño, Francisco de Quevedo - 1626)
En la literatura estudiantil se ve que predominaban los excesos, cosas que, gracias a Dios, normalmente ya no se observan (y es que siempre debe haber algún que otro tuno sub-normal, pero ese es otro tema).
Para llegar a la condición de veterano, se tiene que pasar todo un curso (osea mínimo un año) de aprendiz, pero si el novato no aprendió a comportarse como un caballero, a tocar algún instrumento, no se espabila lo suficiente y sobretodo, no aprende a diferenciar que él entro a la universidad para ser un profesional (licenciado) y no tuno, este proceso de aprendizaje se puede prolongar algunos años.
Cada Tuna tiene sus propias reglas y costumbres (la creación de un perfil del novato/pardillo que debería tener toda Tuna) y lo mismo con respecto a "apardillar", "hacerles novatadas" o "putear a sus novatos", pero no debemos olvidar que todo correctivo debe de llevar una enseñanza (no putear por las puras, salvo que lo hagas para reirte CON tu novato, que no es lo mismo que reirte DE tu novato), y si bien no existe un manual para los tunos, la mayoría lo hacemos bien, y quienes cometan algún exceso, tienen a sus antiguos para que los corrijan.
Como cita un artículo propio de la Tuna de Derecho de Alicante con respecto al aprendizaje y al puteo:
En los primeros días de salir con la TDA, los pardillos se encuentran un poco en las nubes y no entienden porque tienen que hacer caso de lo que se les ordena por parte de los tunos. No entienden los insultos, vejaciones o desprecios de que son objeto; solamente se les da una explicación: “todos los tunos fuimos una vez pardillos, así que no te preocupes que no es nada personal contra ti”.
Podría decirse que este período de adaptación o época de puteo, consiste en dos clases; uno sería un puteo físico (como: “¡ves allí!, ¡haz tal cosa!, etc.), el otro, sería un puteo psicológico (insultos y desprecios). El puteo es la forma por la cual los pardillos empiezan a sentirse integrados en la Tuna; cuando hay algún pardillo con el cual la Tuna no está satisfecha de su comportamiento la manera más habitual de “decirle” que sobra es dejándolo de putear.
Las putadas pueden ser de cualquier tipo siempre que no afecten a la integridad física del novato-pardillo, dependen de la imaginación de cada miembro de la Tuna (a veces muy retorcida). Todas estas “bromas” lo único que pretenden es hacer selección de entre los pardillos que entran a principio de curso, y que al cabo del año sólo queden los que más hayan aguantado (los mejores para los tunos). De entre estos últimos se elegirán los que pasen a ser Caballeros Tunos...
...Respecto a la vestimenta de los aspirantes hay que decir que varía según vayan haciendo méritos durante el año. Al comienzo están obligados a vestir un pijama. Al mes se les permite que lleven el traje de pardillo de la TDA, que se parece bastante al de un arlequín con los colores rojo y negro. Pasados cuatro o cinco meses se les hace un examen de instrumento, y, aquel que demuestra que sabe tocar algunas canciones de Tuna tradicionales, se le da un traje de tuno. Con este atuendo permanecerán hasta el día que demuestren que son dignos de llevar la Beca de Derecho (examen-pardillada).
La mayoría de los tunos de Derecho coinciden en que el período en que mejor se lo han pasado en la Tuna, es el del pardillaje. Muchas veces van contando a los pardillos las peripecias y atrocidades que les hacían sus veteranos tunos, mientras tanto los novatos escuchan atentamente y los ojos se les ponen como platos reconstruyendo en sus cabezas la putada contada por el “tuno cabrón” que tienen a su lado. Unos cuentan que fue la época de más ligue de su vida (seguramente debido a la ternura e instinto maternal que despertaban entre las chicas cuando eran puteados), otros que jamás olvidarán aquella vez que, yendo de viaje, les dejaron a trescientos kilómetros del lugar de destino y que después de haber hecho autostop les cogiera aquel loco que casi les mata, los más , recuerdan a aquel tuno cabrón que les hizo bañare en Enero (N.E: Enero es la época más cruda del invierno español), desnudos y nevando, pero en aquella preciosa plaza de Cáceres.
(LA TUNA - Agrupación lúdica estudiantil, LA TUNA DE DERECHO DE ALICANTE.- Visión Antropológica, Isidoro Vila Soler. 1993)
Con respecto a lo de tocar un instrumento dentro de la Tuna, volveremos a citar la misma fuente:
Respecto a la necesidad de saber tañer algún instrumento, realmente no se trata de una necesidad, sino más bien de una conveniencia para ellos, pues les resultará más fácil integrarse en el grupo, y consiguientemente ser aceptados como compañeros tunos en su día. No obstante, la mayor parte de los veteranos tunos, cuando fueron pardillos, no sabían tocar ningún instrumento. Durante el primer año de prueba (pardillaje) se les enseña tanto a comportarse como Caballeros Tunos como a tañer el instrumento elegido por ellos o a veces sugerido por la propia TDA.
El instrumento con el que habitualmente empiezan la andadura musical es la guitarra española. Se puede decir éste es el mínimo que se les exigirá el día de su examen.
(LA TUNA - Agrupación lúdica estudiantil, LA TUNA DE DERECHO DE ALICANTE.- Visión Antropológica, Isidoro Vila Soler. 1993)
Y sí, leyeron bien, algunas Tunas tienen su examen de novatos/pardillos, en fechas determinadas (como puede ser pocas semanas antes del aniversario de dicha Tuna) en las que el novato/pardillo solicita dar su examen para ver si este posee las condiciones suficientes para llegar a ser tuno. No me consta que en el Perú hayan dichos exámenes, pero me parece que en la mayoría de los casos, el examen es tácito pues en cada salida se observa el comportamiento del novato/pardillo y el avance de su aprendizaje (muchos tunos en reuniones previas acuerdan evaluar al novato y poner énfasis en los errores que comete para corregir dichos errores y que pueda estar preparado).
Pasado este proceso de aprendizaje, llega el momento cumbre, el momento más esperado tanto por el novato como por toda la Tuna: EL BAUTIZO (que generalmente al no existir examen de novatos/pardillos, es una sorpresa):
-¡Viva el compañero, y sea admitido en nuestra amistad! Goce de las preeminencias de antiguo. Pueda tener sarna, andar manchado y padecer la hambre que todos.
(Historia de la vida del Buscón, llamado don Pablos; ejemplo de vagabundos y espejo de tacaño, Francisco de Quevedo - 1626)
Y es el momento más esperado por la Tuna, porque al tener un nuevo hermano, este es el futuro de la Tuna (algunas veces escuché que es el novato/pardillo el futuro de la Tuna, no estoy de acuerdo, puesto que este por diferentes circunstancias puede retirarse de la Tuna, sin embargo el recién bautizado en su momento será un pilar de su Tuna, tan igual como lo son ya, sus antiguos).
Y es que debemos recordar que el novato/pardillo no es nuestro esclavo, ni nuestro sirviente, ni nuestro hijo (genéticamente es imposible que un hijo se convierta en hermano), sí en cambio, es nuestro hermano menor y cuando llegue a ser veterano, lo seguirá siendo.
Es nuestro deber apoyar al hermano menor (incluso desde que es novato), y si comete algún error en sus primeros momentos como veterano, corregirlo con cariño (que nadie nació sabiendo y definitivamente la experiencia es la evidencia).
Hay un dicho popular que siempre debemos recordar: "La vaca se olvida de cuando era ternera"
Y es que alguna vez vi a un tuno novel puteando sin motivo e insultando a los novatos, llegando a decir lo siguiente: "todos los pardillos son unos gusanos miserables", me acerqué a él y le dije: "Disculpa, ¿cuánto tiempo llevas de tuno?", él respondió que hacía 3 meses lo habían bautizado, a lo que yo repliqué: "Eso quiere decir que hasta hace tres meses, tú también eras un gusano miserable?".
Felizmente la mayoría de tunos, no actuamos de esa manera, y quiero finalizar este post, dándole un consejo a todos los novatos/pardillos: respeten a todos los tunos, así ustedes crean que no lo merezcan, y es que hay dos formas de respetar a un tuno:
- O respetas la beca que porta, porque a pesar de que sea un sub-normal, tiene beca y tú no, y aprenderás lo que NUNCA debes de hacer si es que alguna vez llegas a ser tuno.
- O respetas a la persona, aquel tuno que quiere enseñar a los novatos indistintamente de que sean o no de su Tuna.
¡Un saludo para todos los tunos y los novatos/pardillos del mundo!
Un regalito para todos:
"La canción del pardillo"
Ale chalaquin, que entretenido tu post.
ResponderEliminarFelizmente, sabemos a qué nos referimos al hablar de novato o de pardillo, y ellos también lo saben, indistintamente de usar uno u otro término. Pero es bueno siempre saber de dónde vienen las cosas.
Esa frase del Buscon ( que si mal no recuerdo se llamaba Pablos?) siempre me pareció algo muy bonito y romántico, hasta que leí esa parte de la obra y me di cuenta del contexto: la dicen los "antiguos" a uno que pudo pagar una "matrícula",e s decir que pagó su derecho de piso con na suma de dinero. En fin, cosas también de los "pícaros estudiantes" de antaño.
Un abrazo
Exacto mi estimado Orson, pero el que da el dinero no es don Pablos, sino su amo don Diego ya que Pablos (el buscón) era su criado.
ResponderEliminarComo hablamos la última vez (en la cena) yo por esa y muchas cosas más (como dirían los Parchis jejeje) prefiero usar el término novato al término pardillo, lo que no significa que esto sea un dogma.
...Dodo:
ResponderEliminarBuen Post Txalaka valgan muchas aclaraciones uno de los pilares de la Tuna también es la Mujer, la razón de la existencia de esta noble tradición :D
AUPA TUNA!
Varios comentarios Txalaca:
ResponderEliminarYo también empecé hace mucho buscando una explicación del origen del uso de "pardillo" como "novato de la Tuna" a partir del diccionario y llegaba a las mismas conclusiones.
Indagando un poco más descubrí que el término "novato o nuevo" aparece en el Diccionario de Autoridades (predecesor al de la RAE) de 1734 para referirse al "nuevo o principiante en qualquier (sic) facultad o materia". En 1739 agrega el término "tyrón" como "bisoño o nuevo en algún arte o disciplina" (en la versión de 1780 cambia la grafía "y" por la "i", quedando como "tirón"). En la investigación que hacen Tachi y Chencho agregan otras palabras como "dupondio" (que sería la más antigua para referirse a los nuevos en los estudios), "albillo" o "craso" (que al parecer se usaba solo en la Univ. de Alcalá). La primera acepción que coloca la RAE de "pardillo" como aldeano, que anda regularmente vestido de pardo, y que donde equivaldría a palurdo o paleto, vendría de la GERMANÍA o vocabulario jergal de los maleantes del siglo XVI-XVII en España, para referirse igualmente a los hombres rústicos ("El Delincuente español. El Lenguaje (Estudio filológico, psicológico y sociológico) con dos Vocabularios jergales. Imp. de Victoriano Suárez. Madrid, 1896)
A propósito de esto, los más recientes hallazgos documentales del siglo XIX que algunos investigadores hemos realizado nos llevan a una hipótesis que de confirmarse nos presentarían una nueva cara acerca de lo que fue la Tuna: así como existió una Germanía, compuesta por toda una jerarquía del hampa en la España de la Edad Media, también habría existido una "Tunia" ("hermana menor" de la primera) que al igual que aquélla tenía una jerga propia y una jerarquía bien marcada.
Para sustentar esto del lenguaje propio me baso principalmente en algunos textos como el "Entremés del escolar y el soldado" -que hace parte del Auto "¿Quién hallará mujer fuerte?"-, que se le atribuye a Calderón de la Barca, donde dice: "Si verdad le cuento,aunque siempre vengo y voy, no sé dónde voy ni vengo, que es lo que en FRASE ESCOLAR se llama "tunar"; o como cuando Vicente de la Fuente (en su artículo "Costumbres Estudiantinas. La Tuna", publicado en el Semanario Pintoresco Español del 8 de mayo de 1842) dice refiriéndose a un supuesto manuscrito del Bachiller Sotanillas: "La tuna se define, [como] una vida vagamunda y holgazana; pero en LENGUAJE ESTUDIANTIL significa más, pues equivale á divertirse, y comer sin estudiar...
Nota: las mayúsculas son mías obviamente) Existen otros ejemplos pero creo que estos son los más importantes.
La jerarquía del "Reino de Tunia" (término menciondo por Julián de Zugasti en su libro "El bandolerismo" Imprenta de T. Fortanet, Madrid, 1877, tomo V, p. 37 y ss.) iría desde el "Rey de la Tuna" (que hemos encontrado en algunos pliegos de cordel del siglo XIX) y que provendría del famoso "Roi de Thunes" o "Rey de Túnez", en referencia no solo a como se hacía llamar el jefe de los vagabundos y gitanos en París, sino a que el término "Ir a Túnez" o a "la Conquista de Túnez" hacía referencia al robo de los atunes que hacían los cientos de pícaros y vagabundos que llegaban en temporada de pesca a las costas de Cádiz, donde como dice Cervantes en "La Ilustre Fregona": "pasó por todos los grados de pícaro hasta que se graduó en las almadrabas de Zahara, donde es el finibusterrae de la Picaresca". La almadraba es el arte de la pesca del atún y viene desde tiempos prerromanos. La expresión "Ir a Túnez", era en si, ir a los atunes, pero también tenía un lado irónico y de doble sentido, ya que no era difícil ir a Zahara y aparecer en Túnez raptado por piratas berberiscos. Mi hipótesis es que este Rey de la Tuna funcionaría algo así como el jefe de la ciudad que todavía usan los goliardos en Italia. Eso puedo adelantar por ahora.
ResponderEliminar"Correr" es una palabra que en lenguaje escolar significaba "robar", de donde se habría surgido "correr la tuna", en el sentido de robar los atunes o llevar una vida al estilo de quienes lo hacían.
Por otro lado, creo entender que esa "matrícula" que señala Orson se refiere a la PATENTE, que el Diccionario de Autoridades de 1737 definía como: "la contribución que hacen pagar por estilo, los más antiguos al que entra de nuevo en algún empleo u ocupación. Es común entre los Estudiantes de las Universidades, y de ahí se extendió a otras cosas". Seguramente habrán sido testigos en su ambiente laboral de comentarios como que el nuevo tiene que pagar una comida con su primer sueldo o agazajar de alguna manera a los demás. Pues de ahí viene.
Valga decir que en los primeros tiempos hubo algunos estudiantones ("estudiantes eternos" como diríamos hasta hace poco) que se sostenían todo el año con el cobro de esas patentes. Quienes se negaban sufrían todo tipo de burlas y vejaciones. Les podían incautar libros, cartapacios, manteos, sombreros o cualquier cosa susceptible de pedir un rescate a cambio de dulces o golosinas en la pastelería por ejemplo o simplemente aplicarle "el garrote", que era quitarle su dinero.
Bueno hasta aquí mis aportes por ahora. Saludos